EL BRILLO DE LA FELICIDAD

Vengo a contaros que llevo unos meses colaborando con una empresa que está de moda no, lo siguiente. Se trata de un servicio de Glitter Bar, Glitter Bar Málaga en concreto. Y se lo quitan de las manos niñassssss. Es increíble como se pone algo en auge y arramplamos con ello todo lo que nos dejan y más. Y este es el momento de los glitter bar. Y el tema está empezando, el año que viene va a ponerse de locos. Bueno, yo personalmente voy con la reina del glitter, Glitter Mar. Y me encargo de sacarle todo el material audiovisual que luego pueda utilizar en su redes. No se si recordáis el anterior email, pero ella en este caso no es Juan Palomo, vaya. Ya me contrata a mí para ello. De momento donde mas está es en bodas, pero en breves la llamarán para cumpleaños, fiestas de empresa, bar mitzvah... ¡Para todo! Lo veo claro, después de unos meses de acompañarla a cada boda en la que la han necesitado, me doy cuenta de lo mucho pero mucho que le gusta a la gente el brillo. Te ponen un poco de purpurina, bien repartida, con un poco de arte, como el que tiene ella (por que ya os digo que no todo el mundo sirve para maquillar así a la gente) y el evento se multiplica en el éxito. Desde que llego a cada lugar, estoy pendiente de las invitadas que se acercan curiosas al stand, preguntándose "qué es esto" se sientan en la silla, y salen brillantes de allí, y desde aquel momento en el que unos se ven a otros se desata una necesidad de formar parte de aquel arcoíris brillante que gira y gira en el ambiente. Grabo sus caras de emoción, sus gestos de estar flipando, sus sonrisas de satisfechas. Grabo sus wowwwwww, sus dios, estas maravillosa, que se van rulando unas a otras. Grabo y grabo y grabo y creo videos que luego atraen a más gente hacia Mar, que quiere brillar también. Y como me parece una pasada que a la gente le guste tantísimo, y me parece una pasada el arte que crea Glitter Bar Málaga, os voy a dejar aquí el link a su instagram, por si aun no habéis catado... Sí, hoy os he hecho un poco de publi. Bueno, recomendaciones, que nunca está demás tampoco.